Mujeres que sufren demasiado

Los humanos no se parecen a algunos animales que se unen para toda la vida y mueren de tristeza cuando su compañero ya no está.
Las personas hacen una promesa ante Dios con sus votos matrimoniales de “hasta que la muerte nos separe”, pero puede ser que este contrato no esté en su naturaleza, a veces se tratan de establecer cosas que no se pueden cumplir.
El problema es que tenemos estos preceptos tan inculcados por nuestra sociedad (ya sea por la vía educativa religiosa o familia) que hacen ver a los divorcios como un fracaso. Pero no es así, el verdadero fracaso es seguir al lado de esa persona cuando ya no se es verdaderamente feliz.
Seguro todas hayamos experimentado alguna vez de manera directa o a través de alguna amiga, el sufrimiento por el que pasan muchas mujeres al cortar.
Los hombres cuando terminan una relación tienen otro tipo de reacción, caracterizada por la acción, hacen, hacen y hacen. En cambio las mujeres que sufren demasiado ponen un stop en su vida y sólo sufren inconmensurablemente.
Como consejo a estas mujeres que sufren demasiado les diría, olvidémonos del amor para siempre, entendámoslo como: “el amor para siempre, mientras nos haga felices a ambos”. Entonces las decisiones que tomemos no van a ser sentidas de manera tan extrema, desgarrante y en donde la totalidad de nuestra vida está en juego. Las mujeres somos un todo y si nuestra relación se derrumba es doloroso pero no es el fin, después de sufrir y aprender nos vamos a dar cuenta que lo peor es NO intentarlo. Jugársela entera y que no salga como lo esperábamos no es un fracaso, es uno de los dos resultados que podían pasar.
Por tanto, para todas las que estén en este momento experimentando un duelo, les recomiendo que sufran pero que sean optimistas respecto al futuro, el mundo no se terminó, y después de sufrir van a ver que seguimos teniendo a nuestra familia y amigas de fierro, a nuestra vocación que es lo que somos y nos hace felices y que por ahí en algún tiempo va a volver a aparecer ese hombre que nos llene de felicidad y nos haga no poder contener la sonrisa en nuestra cara.
Si por el contrario el dolor es tan fuerte porque no es solo el corte sino que él era el sentido de nuestra vida entonces el dolor debería re direccionarse hacia nuestra propia persona, y ver qué es lo que está mal y dedicarnos a reconstruirnos y recuperar el tiempo perdido. Una vez que destruidas nos hayamos vuelto a construir vamos a ser tanto más fuertes que pocas cosas van a volver a derrumbarnos.

Como consejos en la transición les recomiendo:

• Viajar: encontrarse así mismas en otros contextos ayuda a descubrirse.
• Estar dentro de grupos: familia, amigos, facultad, religión, etc. Estos dan un sentido de pertenencia y contención fundamentales.
• Hacer aquellas cosas pendiente y que nunca las hicimos por falta de tiempo: como un hobby abandonado, otra carrera, cursos de todos los colores, visitar más seguido algún familiar que esté sólo, etc.
• Empezar a tener salidas: aunque éstas deban darse progresivamente y con personas que valgan la pena porque si agarramos al primer perejil que nos festeje el desencanto va a ser mayor. Empezar a salir es fundamental para sentir que hay otros ojos que nos miran, otros hombres con los cuales podramos querernos correspondidamente.

Arriba mujeres que el futuro siempre tiene cosas mejores para nosotras y de lo malo pueden salir MUCHAS cosas buenas!!!